La abogacía es una actividad que no se limita a los jurados, en los últimos años, esta disciplina ha tenido que adaptarse a las nuevas realidades derivadas de la transformación digital, es así, como nacen nuevos conflictos que afectan las vulnerabilidades de los usuarios que convergen en los ciberespacios de todo el mundo y especialmente de España.
El uso de nuevas tecnologías y medios digitales en la gestión legal española, es un tema de valor no solo para los grandes despachos o abogados autónomos sino también para las empresas que tienen algún tipo de presencia on-line. Es por ello, que debe existir una constante actualización acerca de las áreas de acción, las habilidades y las cibercapacidades vinculadas a este sector
El ciberderecho da lugar al ecosistema digital donde se desenvuelven diferentes aspectos de la información, los datos personales en línea, redes sociales, e-commerce, Smart contracts, ciberpatentes, cibercrímenes, entre otros.
Existen dos ámbitos fundamentales que abordan el ciberderecho, tales como: el derecho tecnológico como rama jurídica, que hace referencia a la serie de normas legislativas que regulan todo lo relacionado con las tic y los medios de comunicación, y el derecho tecnológico basado en la digitalización, el cual sugiere el uso de las tecnologías en el marco legal, indiferentemente de la especialidad jurídica. Esto con el propósito de brindar eficacia, precisión y rentabilidad en las labores legales como consecuencia de la digitalización de los proceso. Dentro de esta perspectiva del derecho tecnológico encontramos lo que se denomina como legal tech.
Adaptarse no es una opción, es una acción indispensable ante las nuevas realidades tecnológicas.
Existen diversos problemas en el ecosistema digital dedicado al sector jurídico, como el uso ético de la inteligencia artificial (una tecnología en tendencia que podemos percibir en las redes sociales hasta en grandes maquinarias), la cibertributacion, la ciberextorsión, el ciberacoso, las estafas en medios digitales, los incidentes que afectan no solo a las máquinas, personas o empresas, sino al propio estado.

¿Las empresas españolas deberían preocuparse por cómo tratan los datos personales de usuarios, clientes y empleados?
Desde el año 2018, entró en vigor la Ley Orgánica de Protección de Datos Personales y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD) sustituyendo la antigua ley orgánica 15/1999. Esta ley se encarga de organizar los requisitos y definir los deberes de las empresas, con respecto a la información personal y los derechos de sus usuarios, clientes, y consumidores.
Como consecuencia, las empresas con ejercicio laboral en España y que involucren en su ecosistema digital algún factor o estrategia vinculado a internet y datos personales, están en la obligación de proteger la intimidad, privacidad e integridad de los individuos en cumplimiento con el artículo 18.4 de la Constitución Española.
¿Qué se considera datos personales según la LOPDGDD?
Toda la información en texto, imagen o audio que permita la identificación de un individuo. (Nombres, números de teléfonos, correos electrónicos, domicilios, salud personal, DNI, fotos, notas de voz, etc.)
Nosotros podemos ayudarte con los diferentes aspectos que abordan el derecho tecnológico porque entendemos que: no es solo la aplicación correcta de las normativas que regulan los medios digitales, sino de reconocer las diferentes soluciones y herramientas que salvaguarden la seguridad de los ciberentornos en las organizaciones, así como las distintas alternativas para proteger los bienes físicos y digitales que pueden verse afectados ante un ciberataque (BBDD, hardwares, propiedades intelectuales, cuentas bancarias, entre otros).
Proteger, velar y prevenir son las tres bases del ciberderecho, para nuestro equipo especialista en Auditech, englobando la seguridad de la información y enfocándonos en las verdaderas necesidades del sector jurídico y empresarial.